Si tu gato orina demasiado…¡Cuidado!
Como cualquier otro ser de la naturaleza, los gatos necesitan consumir agua para vivir. Y de igual forma, el líquido que entra en el organismo del gato después de ser aprovechado debe ser desechado.
Los gatos deben orinar, según su peso, cierta cantidad de líquido diario.
El aumento o disminución de la cantidad es un indicador seguro de un desequilibrio en su organismo.
El cuerpo de los gatos es una máquina perfectamente sincronizada que debe producir una cantidad exacta de sustancias cuando funciona correctamente. La orina es una de ellas, por eso si nuestro gato está orinando con mayor frecuencia o mayor cantidad, o viceversa significa que nuestro gato está comunicándonos algún malestar.
¿Cómo puedo saber si mi gato orina mucho?
Saber a ciencia cierta si nuestro gato ha variado la cantidad de orina normal es difícil, especialmente si tenemos más de un gatito. La manera más fácil de hacerlo es midiendo la cantidad de agua que ingiere, porque el líquido que entra debe también salir.
Por eso te recomendamos que, si tienes varios gatitos, aísles en una habitación o sector el que te preocupa. (Dándole más mimos, claro está)
Después puede proceder a medir por un par de días la cantidad de agua que tu minino toma. En un cuenco pequeño mide una cantidad determinada de agua y si después debe rellenar suma eso a la cantidad inicial. Un gato de 4,5 kilos debería consumir una taza 250 mililitros al día. Si está ingiriendo más de eso deberá estar, igualmente, orinando más cantidad.
¿Por qué mi gato orina mucho?: Los motivos
Las razones más comunes para el aumento en el consumo de agua y en la micción pueden ser varias. El calor del verano puede ocasionar un mayor consumo de agua y micción; pero también algunas enfermedades graves. El hipertiroidismo, la diabetes o algunas enfermedades renales suelen producir una mayor micción en nuestros mininos.
Aunque el aumento en la cantidad o frecuencia de la orina en nuestro gato puede volverse un problema, te recomendamos nunca dejar que tu gatito quede sediento. La deshidratación puede empeorar cualquier condición de salud.
Si tu minino presenta otros síntomas como dolor al orinar o fiebre puede estar presentando alguna obstrucción. Si tu minino rehúye de la caja de arena, también puede ser que la micción esté siendo dolorosa. Tu gatito podría estar asociando la arena con dolor y por eso no quiere ir allí. En cualquiera de los casos lo más recomendable es ir inmediatamente al médico.
¡Puede ser una infección de orina y aunque no es algo grave si no se cura a tiempo puede trasladarse al riñón!
Ahí las cosas se ponen más feas.
En conclusión, un gato puede orinar mucho por:
- Calor (Y aumento de la ingestión de líquidos).
- Hipertiroidismo
- Diabetes
- Infecciones de orina.
- Otras enfermedades renales.